¿hasta donde se llega?

Francamente que me he vuelto un ser muy flojo, me da flojera ¡hasta comer! ¡Que horror!.
Bueno, tratare de no escribir esto como un informe.
Los malestares de la quimio continúan fregándome la vida pero ¡gracias a Dios la presencia de Ade me la matizo un poco por algunos días, lamentablemente hubo cambio de planes y ella decidió aprovechar para regresar a su casa a darle una vuelta y un cariñito a los suyos.
El jueves pasado el cirujano no paso consulta y eso hizo que todo se corriera hasta hoy, (que irresponsabilidad) ya tengo la cita lista veremos que dice. Según la Dra. Porras, la oncologa, me deberían operar la próxima semana y si no, volveré a las quimios, se pospondria la operación ¡vaya usted a saber hasta cuando! en todo caso esta tarde sabré y entonces también sabremos cuando regresa Ade a mi lado.
Dentro de todo, poco a poco, van mitigandose los dolores. Carola me tiene tomando jugos de cuanta fruta de color fuerte hay, algunos son ricos y otros no tanto. Los de guayaba, los de fresa y los de mora me encantan pero los de zanahoria y remolacha son ¡horribles! esa broma sabe a tierra...pero me lo tomo ...no queda otra.
Ahora parece que también me van a poner a comer cambur que "yque" es la primera maravilla para todo... me lo comeré, todo con tal de que no sea zamuro. ¿ustedes han oído semejante cochinada? ¿que el caldo de zamuro cura el cancer? ¡¡¡por Dios!!! esa vaina si es verdad que ¡ni a palo! me la como yo. Si no he podido con las patas de pollo... aunque, confieso que tengo la gran sospecha que la sopa que manda mi vecina esta hecha con caldo de pata de pollo. ¡La gente si que inventa!. Me contó uno de los compañeros de quimio que venden el zamuro limpio y desplumado a 70.000 bolívares, en bandejita de plástico y envuelto en envoplast, cazado en el vertedero de basura de San Josesito. ¡Que horror! ¡asco! ¿hasta donde se llega para medio continuar vivo? porque después ¿como se continua viviendo con esa sensacion de asco?
Y ya que nombre a mi vecina, esta ha sido la sorpresa de mi vida. Resulta que esta señora es la típica vecina escandalosa, de música a todo leco, de portazos, de peo tras peo. Cuando yo era las presidente de condominio las discusiones eran de espanto y brinco porque guindaba unos trapos en las ventanas, por la música... ¡ella hacia lo que le daba la gana!...bueno, lo sigue haciendo aunque ya ¡por lo menos no están los trapos. Bueno, continuo contando, yo dentro de todo la defendía de los demás comentando algunas cosas positivas que tenia pero, siempre sabiendo que no era santo de nuestra devoción. Pues bien, resulta que ahora que estoy yo en esta situación, la mujer se ha encargado de traerme unos platos de comida muy nutritivos y de preguntar que mas necesito, de distraerme, etc, etc. ¡SOLIDARIDAD PURA! ¡ningún otro de mis vecinos se ha tomado alguna molestia por mi bienestar. ¡Dios te pague amiga! ¡Tu solidaridad y tu cariño me emocionan hasta las lágrimas!. Claro que también he recibido muestras de amor solidario de otras personas, de mis amigos y mi familia lo que he querido destacar es lo insólito. Dios me ha dado una muestra de aquello que dice que no debemos dejar de buscar la belleza hasta en los lugares donde creemos que no se puede dar. De todas formas ¡porsia! ya le dije que si me enteraba que me da zamuro ¡la mato! jajaja. No, yo se que ella no lo hara... empezando porque no tiene real para comprarlo.

Bueno, ya divague un buen rato. Contare luego en que queda la operacion.